Un poco de historia:
En Cuba, era común que si la leche se cortaba por accidente, no se desperdiciara: se convertía en un dulce espeso, aromático y delicioso. Lo que comenzó como un recurso doméstico se transformó en una tradición, y en Recetas de ATHEJOS, lo honramos con un toque casero y especial, como lo hacían las abuelas.
Ingredientes (para 4 personas):
200 g de azúcar (1 taza)
1 huevo
1 cucharadita de vainilla
1 cucharada de jugo de limón
1 trocito de cáscara de limón (opcional)
Canela al gusto (opcional)
Preparación:
Cortar la leche:
En un recipiente, mezcla la leche con el jugo de limón y deja reposar unos 10-15 minutos hasta que se corte y se formen grumos visibles.Preparar el dulce:
En una olla, vierte la leche cortada junto con el azúcar, el huevo batido, la vainilla y, si deseas, la cáscara de limón y un toque de canela. Mezcla suavemente.Cocinar lentamente:
Cocina a fuego bajo, sin remover demasiado, durante 45 minutos a 1 hora. La mezcla debe reducirse, espesar y tomar un color dorado. El aroma será irresistible.Dejar reposar:
Una vez listo, deja enfriar un poco antes de servir. Se puede disfrutar tibio o frío, solo o acompañado con un pedacito de queso blanco.
Consejo de ATHEJOS:
Para un sabor más acaramelado, puedes dejar que el azúcar se caramelice ligeramente antes de agregar la leche cortada. Es un postre ideal para cerrar una comida con tradición.



